Pensaba escribirle una carta a Gallardón, pero he pensado que lo más seguro sería que terminara colgada en el retrete puesto que a esta gente de derechas no se le puede hablar de sensibilidad. La Derecha y la Iglesia tienen un idilio eterno para una misión única: tener dominada a la clase más humilde, que es de la que viven; porque las prohibiciones sólo son para nosotros; ellos, cargados de cinismo (me refiero al Poder y la Iglesia) no entienden de encorsetamientos ni de privaciones; y si una joven tiene que abortar (sea una monja o una seglar) aborta y aquí, paz y después, gloria. Y a mí me da vergüenza (cada uno haga y piense como quiera) llevar el título de católico teniendo en cuenta lo que de esclavizador conlleva y porque quien con más orgullo (para ellos) lo lleva es una reina fanática (Isabel) que fue como una Hítler del siglo XV y que si no le puso más veces los cuernos al tonto del marido fue porque era una guarra apestosa que tiraba para atrás y había que tener muy pocos escrúpulos para tener un poco de intimidad con ella.
Gallardón se ha propuesto acabar con nuestras libertades usando los recovecos más absurdos y carente de un ápice de humanidad; pero como lo esperaba porque es uña y carne de otro fanático, Rouco Varela, pues no me voy a molestar en escribirle porque, encima, se va a poner gordo de pensar que nos estamos preocupando de él; que esa es otra de sus cualidades: la vanidad. Paso de él.
Has hecho bien en no escribir una carta en papel tisú a Gallardón.
ResponderEliminarPero en un pis-pas has mezclado hábilmente a personajes tan singulares como una monja preñada, la reina Isabel la Católica, Hítler, Gallardón y Rouco Varela.
Y vas y dices:
«La Derecha y la Iglesia tienen un idilio eterno».
¡?¡No te jode!?! Y, ¿qué sería de la una sin el apoyo de la otra? Hacen muy bien de entenderse y quererse y compenetrarse.
Eso no es lo peor. Lo peor es que demasiados españoles, a la una, a la otra o las dos, las damos demasiado apoyo. Si no quieres que lo diga así, lo diré de otra manera: Demasiados españoles —también muchos de los que nos creemos de izquierdas— no damos suficientemente la espalda ni a la Iglesia Católica Vaticana ni a la derecha franquista cedista.
Y así nos va como nos va...
¿Quién voto al PP?
«pío pío que yo no he sío»
Saludos izquierdistas,
Gracias a los dos. Y, por supuesto, tenéis razón.
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