“La luna vino a la fragua
con su polisón de nardo
el niño la mira, mira (Bis)
el niño la está mirando”
Niño, mira qué te traigo:
un martillito de plata.
Luna, no quiero martillo (Bis):
dale un duende a mi garganta.
Y la luna se lo dio ¡Bendita sea!
y el chiquillo se durmió. Ea la ea.
(Duendes)
Pa tu garganta, los duendes;
pal corazón del gitano,
yunque, clavos y alcayatas.
(Muerte)
¿Qué vienes buscando, Muerte?
Deja tranquilo al hermano,
déjalo, no seas ingrata.
Hoy la fragua huele a muerte
y a tu tumba, otra vez vengo.
Ya sé que no puedo verte,
vengo a partirme la camisita que tengo.*
* Los versos entrecomillados pertenecen al Romance de la luna, luna; de F. G. Lorca.
Este pasodoble debería aprenderse por ley. ¡Que complejo es alcanzar la sencillez! Honestamente, Paco, sin ser un "fatiguita" del Carnaval, aún hoy debo felicitarte por este pasodoble (letra y música). ¡Disfruto tanto con una buena coplita que encima me puedo aprender! Gracias por el rescate.
ResponderEliminarNo exageres Dr. Hugo, que me arrebolas.
ResponderEliminarEs verdad que si la copla no lleva la sencillez implícita, no es copla. Puede salpicarse con gotitas poéticas, pero sin olvidar al maestro Machado: "Todo lo que no es folclore es pedantería" Un abrazo de Corpus.
Gracias paco, este pasodoble especialmente me gustó muchisimo, y no solo el pasodoble, esa comparsa trajo frescura, solo por el hecho de salir todos sentados cantando alrededor de la mesa, camarero incluido en la escena y aprovechando los espacios entre coplas, amenizando la espera del respetable con el desarrollo del tipo, me gustaron mucho, (aunque con esas carencias de grandes voces) pero con esa sencillez que cita erfita, al menos a mí me cautivaron.
ResponderEliminarsalu2
Yo no hablaría de carencia de grandes voces. Creo que es una opción intencionada para crear un estilo muy personal.
ResponderEliminarClaro está que es sólo mi opinión y puedo estar equivocada.
A mi me suena a gloria.
Tambien pienso que con casi toda seguridad es intencionado como bien dices Elena,de hecho llegó lejos por ese motivo, pero hay mucha gente que seguramente no lo vieron de esa manera,aunque insisto, pienso igual que tú.
ResponderEliminarsalu2
Para aclarar las cosas: En primer lugar éramos un grupo de amigos que como antojo tuvo el sacar una comparsa; no nos podíamos fijar en si cantábamos bien o mal. Yo, como director y aficionado, me conformo con que el grupo no desafine, lleve un dúo (imprescindible), una voz que adorne algunas partes por arriba y que vocalice bien para que se entienda. Nada más. Pero es que, encima, representábamos una chirigota de los años treinta; ¿Qué florituras se podían hacer ahí que no estropearan todo el contexto? Por nuestro local de ensayo pasaron algunos "artistas" intentando salir en la comparsa y todos se fueron con la misma respuesta: prefiero amigos, aunque no sepan cantar. Salud
ResponderEliminarAmen Señor Duque ...
ResponderEliminarLa musica trasnmite munsho, pero cuando se hace entre amigos se vuelve algo especial, tanto para el que la hace (que conecta con su compañero de forma indescriptible) como para el que escucha que lo nota ...