Hay personas que dicen que ya no hay izquierdas ni derechas; a esos hay que decirles que puede que lo que no haya sea una izquierda pura y coherente, pero derecha sí que la hay; de todos los tipos y para todos los gustos; y lo peor es que están todos rebujados y no hay forma de saber quién es quién. En algunos países de Europa, por lo menos, hay partidos de extrema derecha y dan la cara. Aquí, no; aquí están todos en el PP y son los que marcan la línea política del partido.
Los partidos de la derecha española está formada por una legión de aprovechados que siempre espera que los socialistas laven los trapos sucios. Ellos, mientras la lavadora está funcionando, no paran de despotricar del detergente, del suavizante, de la lejía y del que le dio al botón, pero cuando llegan al poder usan esos trapos y no se acuerdan de quiénes los lavaron. Se llevaron cuarenta años impidiendo la democracia en España; pero cuando ésta fue inevitable, ¡Oh! milagro: todo el mundo es demócrata; hasta Esperanza Aguirre; y no sólo lo son; ¡es que presumen de serlo!
Fíjate, ocioso seguidor, en el tema del aborto; esa es una petición del pueblo en su mayoría aunque nadie lo diga; pero ese trabajo nunca lo haría el PP, al contrario, ellos se alinean con la Iglesia y encabezan manifestaciones en contra. ¿Por qué no lo prohibieron cuando gobernaron? No se atreven. Ni siquiera lo llevaban en su programa. Y mi pregunta es: ¿Lo llevarán en el programa próximo? Me pongo contigo lo que tú quieras a que tampoco.
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