El machismo que más repelo es el que se instaló en las mentes de los humanos como algo natural y que ahí pervive.
Ese machismo nativo que proporciona al hombre valores que no tiene o que todavía no ha sabido demostrar que posee. Ese que lleva en la masa de la sangre todo aquél que, por muy torpe, ignorante y sátrapa que sea, se siente más inteligente, ecuánime y necesario en la Sociedad que su esposa. Ese que ha adquirido todo aquél que por borracho y apestoso que sea, se siente como elegido por los hados comparado con su compañera. Ese machismo que lucen los que ponen su trabajo, por cómodo y simplón que sea, por encima de cualquier labor que realice cualquier mujer. Ese que nos da la potestad a los hombres de pasarnos la vida contando chistes en los que ponemos a la mujer de todo lo malo que se nos antoje, además de mirarla sólo como el boquete en el que descargar nuestros instintos sin preguntarnos, aunque sea por casualidad, si ella tiene derecho a tener esos mismos instintos.
Pero de la misma forma repelo a las mujeres alimentadoras de ese machismo. A esas niñatas que les bailan el agua al más machista y violento del barrio y mueren porque las lleven a lucirlas en su moto. A esas que creen que la liberación consiste en imitar a los hombres y se sienten mejores adueñándose de sus vicios y repitiéndolos. A las que creen que ser femenina significa ser tonta.
Me gustaría una sociedad de iguales con igualdad, no con igualitarismo; en la que ningún sexo se sintiera superior al otro. No me gusta la discriminación de ningún tipo; pero yo he prescindido, sin ningún esfuerzo, de privilegios que tenía por el sólo hecho de haber nacido varón y he roto relaciones con amigos a los que no les río las gracias o a los que no les aplaudo sus correrías fuera del matrimonio; pero no veo que el resto de la población masculina se una a la protesta de quienes defendemos la causa femenina; así que si para conseguir lo necesario tengo que aceptar una discriminación positiva, la acepto. Salud
duque, esta entrada me parece superacertada y de tener una vision clara de lo que significa el concepto de igualdad. Los hombres tenemos que renunciar a los muchos privilegios que tenemos por el mero hecho de ser hombres.
ResponderEliminarMe encanta el carnaval pero hay muchas coplas que siguen manteniendo los estereotipos masculinos y femeninos. Aunque tambien hay personas que cantan coplas igualitarias.
Un abrazo y un beso.
CHAMI.
Como de rienda suelta a todo lo que se me viene a la cabeza escribo cuatro folios. Espero que me entiendas si sólo digo que me gustaría usar sombrero para poder quitármelo.
ResponderEliminarDiscurso muy acertado y digno de reflexión.
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